domingo, 19 de mayo de 2013

I VOLUNTARIADO LIMPIEZA MARISMA DE SANCTI PETRI EN KAYAK.



El pasado domingo 19 de mayo tuvo lugar un acontecimiento importante en Chiclana. El afán de un grupo de más de 50 voluntarios hizo que las marismas próximas al Poblado de Sancti Petri quedaran más limpias de lo que estaban.

Esta actividad puso de manifiesto el compromiso de personas sensibilizadas con el medio ambiente. La empresa local Sancti Petri Kayak, asentada en el poblado desde el año 1998, suministró el equipo, compuesto por kayaks dobles, remos y chalecos salvavidas. También estuvieron presentes durante la actividad sus monitores, que dieron nociones básicas sobre seguridad y manejo en el agua, y una embarcación de apoyo, que cargaba con el volumen de basura, imposible de transportar en los kayaks.

Los voluntarios participantes supieron de la actividad a través del llamamiento que hicieron las asociaciones GEA (Grupo de Ecologismo Activo) y la Asociación Medioambiental Toniza. Entre los objetivos que comparten ambas asociaciones destaca la sensibilización ambiental y la cooperación, por lo que desde todas las partes, se ha considerado todo un éxito el resultado de la actividad.


MUCHOS VOLUNTARIOS, UN OBJETIVO.


Partiendo desde el embarcadero, equipados con guantes y bolsas de basura, los voluntarios se dirigieron hacia las marismas, dejando atrás el muelle flotante y los barcos amarrados frente al Caño Chanarro.

Los voluntarios se juntaron al principio y al final de la actividad.


Muy cerca del muelle, adentrándose en las marismas de Sancti Petri, el paisaje se antoja paradisíaco,  los caños se van haciendo estrechos, y remar entre las pequeñas islas naturales constituye un verdadero placer para todos los sentidos. El mar era tranquilo allí, las olas apenas se notaban, y el leve viento de poniente refrescaba el esfuerzo de remar. Pero en esta ocasión no fueron a disfrutar del paisaje, la misión era clara: recoger toda la basura que fuese posible.

Voluntarios en acción.


Todo cuanto había que hacer era navegar cerca de las islas para que la imagen idílica antes mencionada se transformase en consternación. Ante los ojos de los voluntarios aparecían multitud de desechos que las personas tiran directa o indirectamente al mar. Botellas de plástico y vidrio, garrafas de combustible, bolsas de plástico, tetrabrikes, latas, cajas, ruedas, artes de pesca, cubos y un largo etcétera constituyó la lista de materiales recogidos. Ante la sorpresa de todos, incluso se llegó a recoger una bombona de gas y una defensa de automóvil.

A la vuelta se cargó todo lo que se pudo en la embarcación y en los propios kayaks.

EL RESULTADO, LA SATISFACCIÓN.

Esta actividad ha constituido un rotundo éxito a distintos niveles. Los voluntarios pudieron darse cuenta de la realidad, más allá de la importancia de los eslóganes ecologistas acerca de la sostenibilidad, el reciclaje o el ahorro de energía. Pudieron comprobar con sus propios ojos lo que hay en el mar, lo que muchos tiran, lo que nadie recoge. Lo que en un principio daña la vista, luego repara en las conciencias. Al menos, este gran grupo de voluntarios fue testigo de esa realidad, y predicará con su ejemplo y experiencia por muchos años.

Ver la embarcación cargada de toda esa basura, tan difícil de recoger, fue el mejor reconstituyente para todos los presentes. Todo eso ya no estaría más en el mar. "¡Lo recogimos nosotros!" se oía entre los presentes. El esfuerzo mereció la pena.

Sancti Petri Kayak ha demostrado con esta iniciativa ser una empresa ambientalmente responsable. Saben que el medio natural es su local de trabajo, y de su buen estado de conservación depende su negocio. La rentabilidad intangible de esta inversión es incalculable.



ABIERTOS A REPETIR.

Las partes implicadas en la actividad han acordado que este voluntariado se repita más adelante, posiblemente a finales de verano. Y es que, lo que se ha recogido es solo una muestra de lo que continúa desperdigado por las marismas.


MARISMAS DE SANCTI PETRI.

Esta marisma se sitúa al sur de la Bahía de Cádiz, entre el Caño Sancti Petri y la localidad de Chiclana de la Frontera. 

Es un espacio de alto valor paisajístico, ya que es una de las pocas marismas que no ha sido alterada para su uso como salina. La conformación en islas y la existencia de una importante masa forestal (Pinar del Coto de la Isleta) en las zonas más elevadas, contribuyen claramente a ofrecer una imagen de lo que debió ser en otro momento el paisaje natural dominante en toda la Bahía de Cádiz. Además, es uno de los ecosistemas de marismas más importantes del arco sur-atlántico ibérico. 

Es considerado también como un importantísimo hábitat de reposo, alimentación y cría para numerosas aves acuáticas, tanto en invernada como en sus rutas migratorias. Entre las aves nidificantes en la zona destacan gaviotas, limícolas y estérnidos.

Por su gran biodiversidad, destaca como lugar de cría y alevinaje de poblaciones de peces, crustáceos y moluscos.

En cuanto a la flora, destaca la existencia de una gran diversidad de comunidades vegetales halófitas (adaptadas a los medios salinos) como salicornia, almajo y salado. En las zonas menos profundas se hallan praderas marinas, resistentes a la alta salinidad.

Quedáis invitados a conocer y respetar este entorno.